5.1.08

el diálogo típico



El diálogo típico, y también el más repetido, es este:

Muchacha: Daviiid...
Yo: ¿Qué?
M: ...
Y: ...?
M: ...
Y: ¿...?
M: ...
Y: ¿¡...!?
M: ...Nada.

Así, sin más, sin añadir siquiera un "de Carmen Laforet". Ni que decir tiene que a un neurótico al que la vida, léase las mujeres, ha (han) tratado siempre fatal, pobre yo, tal frase le provocaba una orgía mental de paranoias de mucho cuidado. Pero como el diálogo lo hemos tenido, que lo voy contando, novecientas doce veces desde que todo esto empezó, a bordo de un transatlántico alemán en 1936, o lo que viene a ser lo mismo hace algo menos de un mes, y en todo ese tiempo su sonrisa ha sido más o menos perpetua, al final las paranoias, aburrida de preconizar desastres que no ocurren, se han enfurruñado y se han ido de vacaciones sin decir donde y con billete sólo de ida. Yo, siempre tan desconsiderado, ni siquiera he ido al aeropuerto a agitarlas un pañuelito y desearles turbulencias y accidentes aéreos.

Lo cuál es la excusa perfecta para que yo utilize la palabra preconizar por primera vez en mi vida. Y para celebrarlo me voy a ir a por una cervecita.

Y eso es todo. Que los Reyes te traigan todo lo que has pedido y alguna sorpresa, si has sido buena, y si no lo has sido que se equivoquen y te traigan lo de otra persona de gustos afines pero mayor bondad.

7 comentarios:

  1. Jajajajaja me ha gustado el final.
    Y creo que esas conversaciones las llevamos todas las mujeres de serie, el método de la sonrisa es una buena manera de testear los silencios ;)

    ResponderEliminar
  2. Lara, ejem.

    Ejem ejem. No te contesto, pero te diré que el tamaño de mi sonrisa me divide la cabeza en dos.

    Y te diré también que tu alegría y toda esta diversión ya roza el sadismo, ja ja.

    Sherezade, sí, fascinante mundo ese del lenguaje no verbal.

    Lo que pasa es que cada persona es un mundo, cada mundo un planetilla lleno de pueblos y cada pueblo una colección de dialectos. ¡Qué de diversión por delante!

    Qué bonito todo.

    ResponderEliminar
  3. Que no... que no es sadismo, que es sana alegría...

    ResponderEliminar
  4. (Que cosa me ha venido de pronto de escuchar a Les Luthiers cantando "usted es su sana... María... alegría", ja ja)

    Si yo no digo que sea sadismo, Lara. Sólo que ya lo roza, ja ja.

    En fin. Está bien que haya felicidades colaterales, qué coño, di que sí.

    ResponderEliminar
  5. alegrías colaterales!!!

    reparte, reparte...
    y ya sabes como sigue el dicho

    sádica lara? majeta y exclamativísima!!!!!!!!

    ResponderEliminar
  6. Sé cómo sigue el dicho: Ciento volando, ¿no?

    (Y lo de Lara ya sé, ya sé, pero hey, ¡déjanos a mí y a mi maltrecha imagen de malote paranoico!)

    ResponderEliminar

Con la tecnología de Blogger.

Hola, me llamo David, tengo un blog, me gusta la música que no le gusta a nadie y las películas de Clint Eastwood, aborrezco las fotos de anocheceres y cada vez más libros. Escribo bobadas, sin pensarlas mucho, y cuentos del oeste que, que no cunda el pánico, no cuelgo aquí.