23.9.10

habibi, habibi

Hola, qué tal, cuánto tiempo.

Yo aquí, escribiendo por fin. Podría explicar la ausencia diciendo que la cuarta característica que me define (por detrás de la inteligencia, la belleza y el buen olor) es la consecuencia, y que como estoy en paro pues tenía también parado el blog, pero mentiría. No por lo de listo, guapo y fragante, no, por lo otro, por la razón misma. La verdad es que desde que volvimos a España no he vuelto a escribir aquí porque estaba intentando dejar atrás un trauma al que me vi sometido al poco de regresar.

Verás. El artista antes conocido como Compadre (y a partir de ahora, el Traductor) me comentó por allí, en bastantes ocasiones, que tenía la sospecha de que toda Assilah pensaba que éramos una pareja gay. Y de osos, encima, porque era para habernos visto, los dos bien barbuditos. Yo pensaba que bueno, quizá algún malpensado, porque compartíamos habitación, sí, pero en una habitación bien puede haber dos camas y no sólo una, como era el caso, o quizá porque íbamos siempre juntos, pero tampoco veía yo eso muy sospechoso en un país en el que los amigos se agarran de la mano o del hombro con una naturalidad que sólo tienen los andaluces, a los que sólo se les quita diciendo "Traductor, la manita".

Así que yo pensé que quizá fantaseasen con eso los otros españoles que durante nuestra estancia habitaron el Ryad, llenándolo de ese alegre e insoportable vocerío que dicen típico de los españoles (que lo copiamos aguándolo de los argentinos, en realidad), porque es algo típico español pensar que cualquiera es gay. De hecho yo sospecho que en Chueca sólo existe una pareja gay, pero que el resto del mundo exagera, como cuando las cifras de manifestantes en alguna protesta, y donde dice dos pues dicen medio millón y ea, arreando.

Aparte, aquí el artista ahora denominado el Traductor se ganó este nombre que le pongo hoy porque siendo su afición algo relacionado con la lengua y habiendo ido al África ya dos ramadanes ya va conociendo algunas palabras en árabe y me las fue intentando enseñar, tarea vana esa en la que sólo conseguí retener tres: shokram, que es gracias, halufo, que es cerdo y no tienen, qué dolor, y habibi.

Antes de que yo llegase al moro, aquí el Traductor se iba a tomar tes con los amigos locales que ya había hecho, y cuando estos, en el típico momento filosófico de la noche magrebí, le preguntaban que cómo viajaba solo el pobre, les respondía "no os preocupéis, el día 9 viene mi habibi". Y todos le decían aaah, qué bien.

Habibi, me dijo, significaba "amigo". Y sabiéndolo, nos pasamos todo el maldito viaje llamándonos habibi y sintiendo una cierta curiosidad de por qué todo a todo el mundo le daba o le iba a dar (el traductor lo primero, yo lo segundo) por pensar que eramos homosexuales.

Y pasó el viaje y volví y quedé con la Muchacha y nos fuimos a cenar al sitio al que siempre vamos cuando uno se va allende mares sin el otro. A la salida vimos, más o menos a la vez, un sitio que se llamaba "habibi" y a una pareja de amigos. Me preguntaron por mi viaje y terminé fardando de idiomas recitando las tres palabras que me sé, en el orden arriba recitado. Pero a la tercera la pareja, amable, me corrigió diciendo "no no, habibi no significa amigo, significa amor, cariño... lo que le llaman los maridos a sus mujeres, por ejemplo".

Y yo dije "aaah" y dejó de parecerme poco probable que toda África nos recuerde con afecto como la simpática pareja gay de españoles.

6 comentarios:

  1. Bienvenido.

    A mí el Traductor, el día siguiente de cinocerme, me llevó a cenar a un restaurante de y, principalmente, para gays. Con eso te digo todo...

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  2. No sé si siginificará exactamente lo mismo en todas partes porque recuerdo que en Egipto algunos vendedores nos lo decían y el guía nos lo tradujo como "amigo del alma".

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  3. Porto, lo sé, qué se puede esperar de alguien que va por ahí repartiendo besos a sus amigos...

    Jorge: pues el otro día vi Un Profeta y esa palabra la usa el árabe casado cuando llama a su mujer. Quien no recuerdo que se llamase así, claro.

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  4. yo creo que es un término ambiguo...se puede usar como amor y como amigo...lo que hace muy fáciles los malentendidos amorosos...
    por ejemplo si tu le dices:quiero que seamos solo habibi (amor), ella puede responderte diciendo, era eso lo que yo quería habibi (amor). y así todos tan contentos...

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Hola, me llamo David, tengo un blog, me gusta la música que no le gusta a nadie y las películas de Clint Eastwood, aborrezco las fotos de anocheceres y cada vez más libros. Escribo bobadas, sin pensarlas mucho, y cuentos del oeste que, que no cunda el pánico, no cuelgo aquí.