20.10.08

ovnis en El País

Leo en El País una noticia que viene titulada así: “pilotos de combate estadounidenses recibieron órdenes de disparar contra un OVNI”. Justo debajo incluyen un elocuente subtitular que reza “archivos británicos desclasificados hoy revelan que militares norteamericanos vieron ‘un portaaviones volador’ en 1957.- Un avión comercial estuvo a punto de chocar contra un objeto no identificado en 1991”.

La noticia es, a la vez, un ejemplo prodigioso de cómo funcionan tanto la ufología como el periodismo malintencionado.

No se incluye un link a la noticia original, que viene publicada (aquí) en el The Times inglés, pero al menos sí pone su nombre, por si alguien un poco escéptico o curioso quiere leer algo que no sea la interpretación del patán que haya firmado ese artículo.

La noticia cuenta que en los ficheros desclasificados sobre ovnis que han dado a conocer los militares ingleses está la historia de un piloto americano, Milton Torres, que en la noche del 20 de mayo de 1957 recibió órdenes de despegar cagando leches, de armar todos sus misiles y de soltárselos al blanco en cuanto lo avistase. El blanco era un punto grandote de su radar, que parecía indicar algo del tamaño de un B-52, y por la orden recibida se esperaba que fuese hostil y probablemente ruso: los paranoicos tiempos de la Guerra Fría. En cualquier caso, de pronto el puntito del radar desapareció y Torres se quedó sin nada a lo que soltarle los 24 misiles que ya tenía preparados. Volvió a su base y cuenta ahora a los periodistas ingleses que al día siguiente recibió la visita de alguien de la NSA y que le dijo que mantuviese la boca cerrada respecto a lo que había ocurrido, que en ningún momento llegó a ver nada, y que a día de hoy sigue sin una explicación de lo que pasó. Dice también que aquello tenía el tamaño de “un portaaviones volador”, y termina contando que en opinión de David Clarke, profesor de periodismo y ufólogo, lo que pasó fue que alguien andaba haciendo pruebas un programa secreto de la CIA, llamado PALLADIUM, que se pensaba utilizar para crear señales falsas en las pantallas de radar rusas.

Termina el artículo con tres entradas breves que hablan de otros “avistamientos”, que hablan una de un avión de pasajeros que casi chocó contra un ovni que era un objeto marrón con la forma de un misil, otra de una orden que prohibía a los militares ingleses fotografiar los círculos del heno que cierta gente pensaba que eran una especie de graffitis de aliens y que resultaron ser broma de un par de labradores, y la última y mejor, la que revela la existencia de la carta de una señora que dice ser de Sirio, y cuenta cómo su nave se estrelló en Inglaterra durante la Segunda Guerra Mundial.

Pero claro, esa noticia no tiene chicha: ¿un piloto que vio una cosa parpadeando en su radar y que despegó con orden de cargársela, que no vio nada, justo cuando la CIA andaba probando algo para distorsionar las señales de radar? ¿Y noticias que hacen chufla de los ovnis que hablan de misiles, los caducos círculos del heno y una colgada que dice venir de Sirio? Con eso no se va a ninguna parte, así que en El País han decidido montarse su versión:

Ya cité en el subtítulo. En él ya fabulan, y aquí resulta que los pilotos sí vieron el inexistente ovni. Se dice además que éste estaba inmóvil y que en vez de ser un puntito en un radar salió pitando “a 12.000 kilómetros por hora”. Se incluyen algunas expresiones cuartelarias del piloto y mogollón de cifras y datos para que le den a todo un aura de realismo, se encomienda a Mulder y a Scully y puestos a citar los otros expedientes revelados, coge sólo el de los pilotos del avión de Alitalia que vieron un misil.

Eso sí, de propina añaden que una vez en la tele salió un niño de 14 años que vio algo parecido a un cohete que volaba bajito y luego subió muy alto.

Así que yo termino indignado pensando que hay que joderse con los periodistas que vieron demasiado Expediente X y preocupadísimo voy corriendo a avisar a la Muchacha, no sea que en su periodiquillo le den trapo a las idas de pinza de algún reporterillo con ánsias de fabulador. Y ella me tranquiliza diciendo que no me preocupe, que la noticia del día es que el novio de Falete confiesa que se autosecuestró.

Y yo ya me quedo más tranquilo, sabiendo que hay quien con la que está cayendo sigue teniendo claro qué es lo importante del día a día.

6 comentarios:

  1. ¡El novio de falete autosecuestrado! ¡Válgame dios! ¿Adónde iremos aparar?

    ResponderEliminar
  2. A recibir a Alf, Gurb y la familia de ET con salvas de misiles, Ruidopoerro. A eso vamos a llegar.

    ¡Es que sí que es para autosecuestrarse!

    ResponderEliminar
  3. y...y... te acuerdas aquella vez que vi ovnis sobre la calle San Marcos?

    seguro que pensaste... ovnis, periodista, poesita... no le creo ni media... pues había bolas de fuego gigantes e incandescentes por todo el cielo, y rápidas

    zprrrrrrrr

    ResponderEliminar
  4. Me acuerdo, me acuerdo. Pero es que pueden ser cualquier cosa, las cosas que no se sabe qué son. Globos aerostáticos, efectos ópticos, nubes, reflejos de luz en nubes... de ahí a montar una noticia con cazas con órdenes de disparar y El Fumador de Expediente X...

    Pero se ve que eso vende. Hoy As trae que Uri Geller, que jamás dobló una cuchara, ayudó a Hamilton a ganar en Shangai, y que "confiesa" haberse hecho rico encontrando oro y petróleo con la mente. Claro hombre, claro. Es sólo que cuando Randi lo retó para que hiciese alguno de sus trucos delante de él debía estar con las vibraciones flojas. En fin.

    ResponderEliminar
  5. Bueno, de momento tenemos suerte de que en El País nadie jure haber visto al Mostruo del Spaghetti Volador, que podía ser bastante peor la cosa...

    ResponderEliminar
  6. Elena, ves y di que lo has visto tú. Seguro que a diferencia del comentario que yo intenté dejarles diciendo las diferencias entre ese artículo y el que dicen citar, te lo publican, los tíos desgraciaus.

    Lui, puestos a tener cosas volantes yo me sigo quedando con el

    A sixty ton angel
    falls from the sky
    A pile of old metal
    a radiant blur...


    Y me alegra mucho que veas tanto símbolo útil.

    ResponderEliminar

Con la tecnología de Blogger.

Hola, me llamo David, tengo un blog, me gusta la música que no le gusta a nadie y las películas de Clint Eastwood, aborrezco las fotos de anocheceres y cada vez más libros. Escribo bobadas, sin pensarlas mucho, y cuentos del oeste que, que no cunda el pánico, no cuelgo aquí.