28.7.08

para pensar en el paradigma del tiempo

Hoy toca anĂ©cdota robada prestada: Xavie (que se mira a si mismo un tanto sorprendido, Ășltimamente, al verse convertido en personaje en este blog. ¡Sufre, maldito!) apareciĂł por pura casualidad, porque de acuerdo, estĂĄbamos en su barrio, pero cuando alguien le advierte de que pasarĂĄ por ahĂ­ alguna noche del fin de semana Ă©l acostumbra a decir a voz en grito que por ahĂ­ sĂłlo sale entre semana y que los viernes y los sĂĄbados se va a otros rincones de la ciudad. Pero recibiĂł la visita de Nano, un amigo que de cuando en cuando se acerca por su casa para devastarle las reservas de flamenquines, y harto del expolio al que Nano somete a su nevera con una cierta y preocupante periodicidad se lo llevĂł a vagar por las calles y fumar y hablar a gritos y asĂ­ fue como nos los encontramos nosotros, mĂĄs o menos.

Nano tiene un tĂ­o que en su dĂ­a estuvo destinado al sur del SĂĄhara (¿ex-?)Español como piloto de helicĂłpteros del EjĂ©rcito del Aire, y que decĂ­a siempre que allĂ­ la gente era muy cordial, muy sociable y radicalmente distinta. Mientras tomĂĄbamos gintonics y dosis letales de CapitĂĄn Morgan contĂł que un dĂ­a iban su tĂ­o y el copiloto de su helicĂłptero en coche camino del helipuerto cuando se encontraron con dos tuaregs que se pusieron a hablar con ellos, al principio las frases corteses de rigor que deben decirse en esos casos (hola que tal, refrescĂł anoche, se va levantando una brisita muy rica, pedazo de tormenta de arena la de ayer y cosas asĂ­, alcanzo yo a imaginar), y luego temas mĂĄs profundos, empujados todos por la recĂ­proca curiosidad. Contaba Nano que le dijo su tĂ­o que los tuaregs estaban acampados por allĂ­ cerca y que mientras permanecĂ­an acampados liberaban a sus camellos y los dejaban por ahĂ­ en algĂșn terreno con pasto y agua, y que cuando iban a levantar el campamento alguien tenĂ­a que ir a recoger los camellos y esa era la tarea que tenĂ­an asignada aquellos dos hombres. Los españoles les preguntaron hasta dĂłnde tenĂ­an que ir, y los tuaregs les indicaron una direcciĂłn que a los españoles les cogĂ­a de camino segĂșn la ruta que debĂ­an hacer en el helicĂłptero. ¿Y cuĂĄnto tardĂĄis en llegar?, preguntaron, y los tuaregs les respondieron que caminando a buen paso, un dĂ­a y poco. Pues si querĂ©is os acercamos en el helicĂłptero, se ofrecieron los españoles, y fue entonces el turno de los tuaregs de preguntar que cuĂĄnto tardarĂ­an viajando de esa manera. Tres, cuatro horas, respondieron los españoles. Y los tuaregs se miraron, menearon la cabeza y dijeron que muchas gracias pero no, porque entonces ¿quĂ© diablos iban a hacer ellos el resto del dĂ­a y pico?

6 comentarios:

  1. Siento ser A+ y no vivr en Sevilla, pero reenviaré el mensaje.

    Me imagino que los conceptos tiempo libre y aficiones no deben estar muy extendidos en la cultura tuareg. Por lo demås, una gran anécdota, de ésas que sólo aparecen invocadas por el Capitån Morgan, con cuya compañía yo también he pasado muy buenos ratos.

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  2. Perdona por ser tan pardillo. De todas formas, yo creo que los tuaregs no fueron porque habían recibido el puto email del niño y ya no se fiaban ni de Dios, lo que también tiene su lógica. Acepto el tirón de orejas y mis disculpas con cara de tonto. Nunca se sabe como se puede conocer uno. Lo mismo me he inventado el email para difundir el arte...

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  3. ¡Vaya, vaya, vaya! ¡CĂłmo crecen los enanos en este circo!

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  4. Ruidoperro, no, probablemente los tuaregs no deban tener en mucha consideración los conceptos "tiempo libre" y "aficiones". Tampoco creo que les hagan mucha falta, porque sospecho que tampoco tendrån en mucha consideración los de "jornada laboral de 40 horas", "madrugar para ir al trabajo" o "pasarse 8 horas al día sentado en una silla". La anécdota puede entenderse en plan paternalista simpaticote, pero en mi opinión así te pierdes lo mejor de ella...

    JL, si el arte depende de medidas así, apañados vamos.

    En cualquier caso a este blog los correos alarmistas sobre bulos de internet le vienen pequeños y el arte le viene demasiado grande. Mantengamos rumbo (browniano) y altura a ras de suelo...

    Nån, ja ja, joder con los enanos... entre la Muchacha, que duerme diciendo estå soñando con Sawyer de Lost que va matando enanos y le estå dando mucho miedo a la pobre y que ayer vi Escondidos en Brujas, donde el tema de los enanos es tratado de forma sublime...

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  5. david, mi comentario no era paternalista, o eso creo, no iba en plan de : "oh, pobres tuaregs, que no saben lo que es el ocio", era mĂĄs bien pensando en los distintos que somos unos de otros.

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  6. Vaya, me alegro, y te leería paranoico, y te entendí un tanto mal. O bueno, mås que mal, así, paternalista. Pero sí, tienes razón en que somos muy distintos. No sé, a mí es una anécdota que me hace pensar mucho, y me divierte pensar así, no sé. Tampoco es que yo tenga mucho problema con el tiempo, que todo eso de la jornada de ocho horas, siendo objetivo y viendo el tiempo que dedico a leer blogs, a escribir en este y a curiosear sobre, qué sé yo, los puntos de Lagrange o los Asteroides Troyanos, hmmm. En fin. Pensaré mås que en plan introspectivo en abstracto, supongo.

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Con la tecnologĂ­a de Blogger.

Hola, me llamo David, tengo un blog, me gusta la mĂșsica que no le gusta a nadie y las pelĂ­culas de Clint Eastwood, aborrezco las fotos de anocheceres y cada vez mĂĄs libros. Escribo bobadas, sin pensarlas mucho, y cuentos del oeste que, que no cunda el pĂĄnico, no cuelgo aquĂ­.