21.3.10

merecida mariconada de canción

Esta:

Toca porque tengo una panda de amiguitos que no me merezco. Perdón, corrijo: varias pandas, pequeñas, pero varias a fin de cuentas, pues no se pueden contar con un solo dedo, por grande que sea.

Hoy, ¡por fin!, me he despertado harto de dormir, que no sé cuánto hacía de ello, y hoy, por fin también, aunque a este por fin no le pongo admiraciones porque, pese a que al menos a mí me admira, sobre todo me deja perplejo... ay, que me enreveso, recomienzo: hoy, por fin, puedo ir por la vida diciendo que soy fotógrafo.

Porque eh, señor, señora, señorita, tengo obra expuesta.

Y esto es así porque ayer madrugué más allá de la legalidad del sábado para volver a Madrid después de hacerle a mi padre el mejor regalo que pude hacerle por el día del ídem (y no por el regalo en sí, sino por el efecto, que fue decirle a mi padre lo que es una obviedad para todo el que alguna vez me ha escuchado hablar de él pero, ironías de la vida, no para él, y es que yo a mi padre le quiero mucho más de lo que él sospecha) para, gracias, primer amigo de la enumeración, colgar mis fotos de las paredes de El Ladrón de Tinta. Tres horas y pico que estuvimos allí mi jornalero andaluz y yo, venga a cortar tiritas de celo, poner chinchetas y andar de un lado para otro con hebras y hebras de hilo transparente, que casi nos estrangulamos a nosotros mismos. Tres horas y pico, que pudieron ser menos por las pausas que hacíamos de cuando en cuando para tomarnos una caña, que lo cortés no quita lo valiente.

Así que mil gracias, compañero. Debí regalarte una foto, directamente. Pero es que estoy sin blanca, compréndeme. Y qué bonito ha quedado el bar, que parece que las fotos fueran de otro mejor que yo, caramba. Y qué bonita nos quedó la pared lisboeta y el rinconcito DF.

Y luego, cumplida la tarea que me ha dejado sin resuello esta última semana y pico, por fin pude descansar y tirarme en el sofá a ver la pertinente peli de acción pasando las escenas de parloteo, como debe ser, y luego ea, al cumpleaños de otro amigo, de otra panda distinta y ya, como pasa el tiempo, decenaria, quién lo iba a decir.

Y allí las sorpresas: que si un tipo al que quiero más que a mis hermanos, si los tuviera, se ha hechado una novia de nombre literario, quijotesco y, digamos, dulce, y que si otro par de amigos, casados y residentes en Madrid, que diría Mayra, no saben si están embarazados o no, es decir, tienen un embarazo cuántico, a lo gato de Schrödinger.

La velada fue tremenda: cuando unos querían meterse con el otro, le recitaban pasajes del Quijote. Cuando el otro quería meterse con los unos, enunciaba postulados de la física cuántica. Yo, siendo como soy un alma pura con la que no hay como meterse, no paraba de hacer ambas cosas y de tomarme whiskys como quien sabe que no habrá mañana, o como quien por fin ha escuchado un pitido final de partido y tiene que celebrarlo copa viene copa entra. Como quien ya puede ir por la vida mirando por encima del hombro a la plebe, practicando el esnobismo y diciendo, en los escasos huecos en los que el tema de conversación no eran el Toboso, los Molinos o las habitaciones cerradas donde a falta de un observador dos sucesos eran equiprobables y coexistentes en la realidad cuántica, que oigan, que un servidor ya es fotógrafo con su obrita expuesta y a la venta.

Y qué gusto da tener amigos que lo ayudan a uno dándose una panzada a cortar celo y hundir chinchetas y hacer nuditos invisibles un sábado a horas absurdas, o que lo matan tanto de alegría al contarle lo bien que les va que no queda más remedio que pasarse toda la noche metiéndose con ellos y riéndose a su costa, porque de alguna forma hay que manifestar la alegría, y obviamente va a ser con sarcasmos y con coñas, porque no todos somos Queen ni somos capaces de cantar una mariconada de canción para decir que qué bonita que es la amistad.

En fin. Puestos a ser semihorteras y ahora que lo pienso, se me ocurre otra canción estupenda sobre la amistad con la que cerrar el post:

11 comentarios:

  1. Solo esto, que publiqué hace algunos días:

    Mi homenaje
    Vicente Gallego

    Por cuanto ya he leído,
    me permito afirmar que a nuestro gremio
    le parece arriesgado dedicarte un poema.
    Tememos un exceso de emoción
    y nos asusta el tópico, sin reparar, tal vez,
    en que es sentimental y tópica la vida,
    y en que no hay sentimiento
    más sobrio y menos huero
    que aquel al que rehuye la cobarde retórica
    de nuestra recelosa tribu.
    Pocas veces encuentras, amistad,
    el lugar que mereces en los versos de un hombre:
    te lo usurpa el amor, ese afecto inconstante,
    sentimental y tópico que se dice tu hermano.
    No pretendo cargarte de adjetivos,
    compararte con nada ni sumar tus virtudes;
    solamente quisiera, aunque sea una vez,
    certificar mi asombro ante tu gran ausencia
    y rendirte homenaje.
    Yo te canto, amistad,
    sosegada pasión que bendices mi vida.


    Un abrazo,
    X.

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  2. Merecidísima mariconada de poema, excepto por la parte de la ausencia ;)

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  3. (¡pero cómo estáis los dos de amorosos el uno con el otro!)

    estoy deseando ver el Ladrón

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  4. Felicidades, aunque no esté de acuerdo con eso de que ya puedes llamarte fotógrafo por tener obra expuesta. Ya lo eras, y bueno.

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  5. Después de ver las fotos que nos enseñó Jorge y constatar los estragos del tiempo diez años después habría que modificar esa canción del "Friends will be friends". Algo con una letra más del estilo "Borrachuzos will be decrépitos, pero friends"

    Y nada, el viernes nos vemos y arreglamos el cabo suelto, que entre quijotadas y schrödingadas, es cierto eso que dices que te libraste de ser objeto de mofa. Bueno, siempre que no contemos las risas que nos echamos los tres a tu costa en cuanto te dejamos en plazaspaña 8-)

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  6. qué bello y cursi tu post Davicillo
    todo es tan suave y tan tranquilo que por fuerza debe ser feliz la cosa esa y los amigos esos que describes...

    muy bonito! no sabes la rabia que me da perderme la inauguración
    aunque para los que te hemos visto cámara en mano el título de fotógrafo te venía de mucho antes

    un besote!

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  7. Lara: todo platónico, ¡todo platónico!

    Aroa: ¿miedo nos? ¿A TI?

    Permítame que lo du-de.

    Marina: cuénteme, ¿cómo son esos poetas del Bremen?

    Perrico: en tu caso más bien la cosa sería Friends will be Fiends.

    María: rebota rebota y en tu culo en pompa explota. Lo de cursi, digo.

    Al resto, gracias, pelotilla.

    Jorge: como te confesé por mail, traicioné mi credo y dejé el Mustang en el garaje.

    Y me pasé la tarde corriendo con dos Lamborghinis, un Gallardo y un Murcielago.

    ¡Yo pecador!

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Hola, me llamo David, tengo un blog, me gusta la música que no le gusta a nadie y las películas de Clint Eastwood, aborrezco las fotos de anocheceres y cada vez más libros. Escribo bobadas, sin pensarlas mucho, y cuentos del oeste que, que no cunda el pánico, no cuelgo aquí.