13.10.09

premios nobel

Anda la gentecilla indignada porque le han dado el premio Nobel de la Paz a Obama por, supongo, ser medio negro, presidente de EEUU y haber dicho cosas bonitas, aunque no haya hecho nada por la tal Paz, esa, excepto quizá, quien sabe, ser fan de Paz Vega. Lo entiendo (sobre todo lo de ser fan de Paz Vega, porque quizá los presidentes también sean seres humanos), aunque no lo veo tan criticable, la verdad, por las implicaciones del asunto. Si se puede dar un premio Nobel por la intención, que no por los hechos, entonces yo, por ejemplo, podría ser premio Nobel de literatura sin toda la farragosa tarea de escribir doce o trece novelones espléndidos.

Así que a mí me parece estupendo que le hayan dado el Nobel a Obama. Pero vaya desde aquí mi sugerencia para los señores suecos, y ale, a ponerse y a ser coherentes, y mi Nobel que me lo manden contrarreembolso si quieren, que no tengo esmoquin para la fiesta, de todos modos.

Y este post es así de breve porque se me acumulan los temas y en un ratito pongo otro. No se vaya nadie a pensar que me ha dado por ser conciso y dejar de torturar al personal escribiendo, por fin, posts que tengan menos de cuatrocientos párrafos. De eso nada, aquí se viene a sufrir, como decía aquel otro tipo.

7 comentarios:

  1. ¿Y qué premios dices que son esos?
    Y ese tal Obama... Creo que no me suena...

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  2. En realidad los cabreados por el Nobel a Obama están completamente divididos entre los que reniegan por darselo a un negro medio progre con buenas intenciones declaradas y ningún hecho concreto realizado, y los que opinan que le han denigrado equiparándole a Kissinger, Arafat, Ho Chi Min y otros guerreros y manipuladores de la paz.

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  3. Vanbrugh: el otro tipo era aquel de Fama, la serie, no la aberración televisiva. La serie, no nada de Cortázar.

    Rober: unos, que dan, y eso, excusas para tomarse unas copas, como todo.

    Lansky: agrupándonos así queda feo, hombre, porque yo no tengo nada en contra de que le den el Nobel a un negro, a un medio progre o a un bienintencionado. A mí lo que me daría por culo, si no viese esta espléndida oportunidad de pedir otro para mí, es que se lo den a alguien que no ha hecho nada por ganarlo.

    Lo de denigrar a Obama comparándole con esa gente, bueno, hombre, esa gente, más bien, denigró ese Nobel, o a los cretinos que lo concedieron.

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  4. No, si que te den a tí el Nobel de literatura me parece coherente con que le den a Obama el de la Paz; si lo que se premia son las intenciones...(aunque en ese caso también mel o podrían dar a mí, o el de Fisiología y Medicina, por mal y anticuado nombre del de Biología)

    (Y dile a tu verificador de palabras que no me haga escribir palabrotas)

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  5. Lansky, sí, te lo podrían dar también a ti, ¡peroyolodijeprimero!

    Así que ala, a la cola. El del 2010 para mí, y si quieres ya el del 2011 para ti.

    Y mi verificador de palabras tiene vida propia, y nunca me hace caso.

    Nan: ya, pero me hace pensar en mi cariño por los grupos de música difuntos. Te pueden gustar sin reservas porque todo lo que tenían que hacer ya lo hicieron, no como los grupos en activo (o peor: las atroces reuniones y renacimientos de grupos, brrr), que tienen tiempo y tiempo para cagarla y echar a perder su música y todo lo que son.

    Pues con los Nobel bienintencionados y esperanzosos me da el mismo escalofrío.

    Doble, porque al escribir Nobel esperanzosos he pensado en una tal Esperanza recogiendo un Nobel.

    Y ahora no voy a poder dormir...

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Hola, me llamo David, tengo un blog, me gusta la música que no le gusta a nadie y las películas de Clint Eastwood, aborrezco las fotos de anocheceres y cada vez más libros. Escribo bobadas, sin pensarlas mucho, y cuentos del oeste que, que no cunda el pánico, no cuelgo aquí.