Muchas veces al hacer la transformada de Fourier que convierte la vida, esa cosa grandota y fractal, en las palabras que van encajándose en este blog, la inevitable simplificación puede parecer que vuelve la cosa un tanto poética, quizá un tanto idealizada. No es así: las cosas son tal como las cuento. Vale que a veces exagere un poco, vale que a veces, cuando sé que se va a notar, miento e invento, pero por lo general, son así. Todo poesía, todo inocencia, todo arrebolamiento. Para demostrarlo, sin simplificar y sin poetizar, de forma totalmente literal, aquí van las tres mejores frases de amor que le he propinado a la Muchacha, para su regocijo y, no sé por qué, carcajada.
3: Eres más guapa que el paquete de Fortuna nuevo.
2: Si fueras una patata, serías una Lays Gourmet.
1: Te quiero más que a las croquetas de mi madre (ésta última, por cierto, dicha aquella primera noche. Avisada quedó).
27.9.08
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Con la tecnología de Blogger.
Hola, me llamo David, tengo un blog, me gusta la música que no le gusta a nadie y las películas de Clint Eastwood, aborrezco las fotos de anocheceres y cada vez más libros. Escribo bobadas, sin pensarlas mucho, y cuentos del oeste que, que no cunda el pánico, no cuelgo aquí.
jejeje. qué grande eres, guapetón.
ResponderEliminarY esa muchacha... un amor.