20.2.11

palabra de Yahveh

(Como no tengo fotos de Dios, pongo la de un angelote que le mira raro)

Por fin estoy cumpliendo un despropósito de año nuevo: me estoy leyendo la Biblia.

Está siendo divertidísimo, en realidad. Aunque Yahveh es un tipo bastante extraño: será omnipresente y omnisciente (aunque yo no he leído todavía que lo sea), pero fue bastante bobo con el asunto de Caín y Abel.

Va Caín, descalabra a Abel, y se va silbando. Al rato aparece Dios (aún nadie ha dicho que sea omnipresente. Tampoco se ha dicho nada de que haya más malo que una culebra que habla, por ahora) y se mantiene, más o menos, este diálogo.

-Wassup, Caín.

-Wassup, Yahveh.

-Oye, ¿qué sabes de Abel, que lo estoy buscando y no lo veo?

-Hum... ¡qué buena tarde hace!, ¿eh?...

Pero al final Yahveh se da cuenta de la vaina y se mosquea muchísimo.

Abel, hijo de Adán y Eva, se va de destierro. ¿Y dónde se va? ¡A una ciudad! Que me pregunto yo qué hacía una ciudad ahí, si los únicos habitantes del mundo, en aquel momento, eran Adán y Eva. Tenía que ser la leche la vida nocturna de esa ciudad.

Hay partes en las que me confundo un poco, como cuando Dios crea al hombre y, según el primer relato de la creación, lo crea "hombre y mujer", a su semejanza (¡Yaveh era hermafrodita!). Y justo después te cuentan el segundo relato de la creación donde no, lo crea hombre, y luego viene el asunto ese de la cirugía y la clonación y la manipulación genética (porque Adán tendría cromosomas XY y Eva, claro, debía tenerlos XX: alguien tuvo que borrar una de las patitas de la última X).

Y mi impresión general es que Dios será un zoólogo estupendo, tanto bicho que creó, pero como narrador es bastante cutre. No para de repetir palabras. Es capaz de decir "corrupción", por ejemplo, cada dos frases, cuando va y le dice a Noé que se va a cepillar a la humanidad mediante un cataclismo que debió ser como un octubre y un tercio de noviembre en Ferrol, 40 días lloviendo.

Esa, por ahora, es la parte en la que me he estancado, porque me da muchísima risa: justo antes, los copistas de la palabra de Dios te van haciendo una lista de sucesores de Adán y Eva, y el método consiste en ponerte que nació, que a tantos años tuvo a un hijo (el más zascandil fue uno que lo tuvo a los 60. El resto, más maduros o más torpes, se esperaban hasta los 150 o los 300 para tener un churumbel), y que después vivió tantos años más, hasta un total de los que fueran (se agradece la enseñanza empírica a sumar, en cualquier caso).

Todos vivían en torno a los 900 años y pico. Y resulta que cuando se llega a Matusalén, que vivió 970 años o por ahí, te dice que tuvo un hijo a los nosecuantos años, y que después vivió 762 añitos, todavía.

Su hijo le dio un nieto a los 162 años: se llamó Noé.

Y a los 600 años de vida de Noé, va Dios e inunda el mundo y mata a todos los hombres y a los animales no porque, por orden suya, Noé salva a los animales, los reptiles y los pájaros (obviamente nadie se acuerda de los peces, que no debían ser tan corruptos, pero claro, ¿a quién no le gustan los acuarios?). Se salva Noé y familia, sus hijitos y sus mujeres.

Y si uno hace la cuenta, lo del padre de Noe se entiende porque había muerto 5 años atrás... pero 600 + 162 = 762, es decir, que Matusalén vivió el tiempo que tardó su hijo en parirle al nieto del Arca, mas los 600 años que pasaron hasta el diluvio.

Y claro, me dio la risa, ¿¡Noé se olvidó al abuelo en la gasolinera!? ¿Fue accidental? ¿Fue aposta? ¿Tan plasta era, a sus 962 años, sin que se hubiera inventado el Sonotone ni la brisca?

Y me da la risa, y no consigo pasar de ahí.

Es una pena, porque sé que me esperan la prostitución inducida de familiares y parejas de los elegidos del señor para con los señores de Egipto, y después la vida de Jesús, que seguro que guarda alguna cosa jugosa que se olvidaran de contarme en la Catequesis. ¡Y al final el apocalipsis, que era inminente hace 2000 años, cuando se supone que el mundo sólo tenía 4000 años!

Vamos, que tan, tan, tan inminente no era, la verdad.

3 comentarios:

  1. ¡Has puesto Ferrol!

    Ya te decía yo, hablando de los niños y la clase de Religión, que en cuanto se dejaba una puerta abierta al razonamiento la corriente de aire se lo llevaba todo.

    Un abrazo.

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  2. Ya he olvidado muchas cosas de ese libro (lástima que entonces no tomara yo notas), pero se me quedó grabado lo de que se abate una plaga sobre los israelitas (y cuándo no es jueves), y un profeta dictamina que ha sido una familia concreta, que no ha pagado el diezmo. Creo que fue Josué el que se va para la familia en plan coleguita y les dice "venga, tronco, no seas chungo y dinos dónde tienes guardado ese diezmo, anda, totá, qué mas da". El otro lo dice y, una vez trincada la pasta, Josué ordena lapidarlos del tirón...

    La verdad es que uno entiende lo que decía Borges acerca de que la religión es una rama de la literatura fantástica.

    (Nota: en una reunión de catequesis (sobrinos políticos mediante) el cura pregunta "¿cuántos de vosotros queréis ser curas de mayores?"

    Y levantan la mano tres. Tres niñas.

    El cura carraspea. Duda unos instantes. luego murmura "bueno, todo se andará".

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Hola, me llamo David, tengo un blog, me gusta la música que no le gusta a nadie y las películas de Clint Eastwood, aborrezco las fotos de anocheceres y cada vez más libros. Escribo bobadas, sin pensarlas mucho, y cuentos del oeste que, que no cunda el pánico, no cuelgo aquí.